Para preparar esta deliciosa quiche necesitaremos una lamina de masa quebrada, 3 huevos, 250 gramos de bacon, 200 gramos de queso (se puede poner uno que nos guste, pero por ejemplo el queso emmenthal le va muy bien), 200 ml de nata, 150 ml de leche, aceite y sal.
Lo primero es estirar la masa hasta obtener el tamaño ideal para nuestro recipiente. Precalentamos el horno a 180º y cuando esté caliente metemos el recipiente con la masa y o bien la pinchamos con un tenedor para que no suba o bien le ponemos unos garbanzos encima. Dejaremos la masa aquí durante unos 15 minutos o hasta que veamos que está casi hecha.
Por otro lado ponemos un poco de aceite en una sartén y sofreímos el bacon ligeramente. En un bol batimos los huevos, y mezclamos con la nata y la leche. Añadimos el queso (previamente rallado), el bacon y un poco de sal (al gusto).
Cuando la masa esté lista, la sacamos del horno y vertemos en su interior la mezcla anterior. Volvemos a meter en el horno hasta que la crema esté cuajada (suele ser en una media hora).
