La
crema de brécol y nata es una sabia opción para poner de entrante o primer plato, ya que te aportará todos los nutrientes necesarios para disfrutar de una comida saludable y excelente. El brécol además de antioxidante, te ayudará a combatir los signos del antienvejecimiento, logrando una piel más tersa y suave.
Cuece un manojo de brécol en abundante agua salada con una patata mediana. Cuando los dos ingredientes estén tiernos, retíralos y escúrrelos, tritúralos en un recipiente grande junto a un chorrito de aceite de oliva y un chorrito de nata. Agrega un poquito de caldo vegetal, si te ha quedado muy espera, rectificando la textura de la crema.
Si no puedes tomar lactosa, siempre podrás sustituír la nata por leche de soja, resultando un sabor extra delicioso y muy apetecible, más suave, aunque extremadamente digestivo. Para decorar, puedes utilizar un poquito de queso mozzarella o queso fresco o unas hojas de hierbabuena o perejil.